MicroObras, dos obras breves en una misma entrega
Por Guillermo Tagliaferri (guille.tagliaferri@elcafediariook.com)
Edición: Florencia Romeo (florencia.romeo@elcafediariook.com)
Dos presentaciones breves, separadas por una interpretación virtual, es la propuesta del Ciclo MicroObras. Cosas mías y Pakiasas son las obras que, a cargo de tres intérpretes cada una y producidas por el Grupo Tramoya, invitan a investigar las profundidades de perspectivas juveniles llevando sus límites al extremo.
El azar, lo absurdo, la risa, lo real, lo irreal y la palabra como motor de movimiento, se hacen presentes en esta discusión escénica que combina teatro y danza. Y en el medio, entre una y otra obra, una pantalla gigante refleja diseños en tinta al agua de la artista visual Ailín Monjes.
Cosas mías, la combinación de tres amigos
La función comienza con Cosas Mías, de manera muy informal: mientras el público va ingresando a la sala, Iara Nicodemo y Lautaro Rodríguez Giusto –que además de actuar es el director– van armando y acomodando el departamento: mesa, sillas, mate, galletas y un tender donde cuelgan ropa. Cuchichean entre ellos, hasta que todos los espectadores están y ahí comienzan a hablar en voz alta y a intensificar los movimientos.
Se suma Malena Palet, una joven con varios tocs y con diversas cuestiones que la mortifican. La meditación es su camino para lograr equilibrio emocional y, en ese instante, sus dos amigos, vestidos con trajes de baño, se adentran en las profundidades de lo que esconde y poco a poco van tratando de descubrir que lo oculto se viste de transparencia. El movimiento y las expresiones corporales, en una brillante complementación, logran un clímax perfecto.
Pakisas, tres jóvenes transgresoras
La segunda obra, Pakisas, con dirección de Josefina Coppa y performances artísticas de Loli Mohorade, Milena Nieto y Abril Vissani, se inicia con las tres actrices disparando una catarata de palabras, ante un micrófono, que llevan a la libre interpretación. Con un estilo satírico y transgresor, las tres actrices vinculan sus historias a la descomposición surrealista del tiempo pasado.
Aquello que fue se recicla a una nueva verdad que se desnuda en su interior, superpuesta por la nueva era. El pensamiento no se juzga, sino que se integra y simplemente se toma o se deja. Los movimientos corporales de las tres jóvenes protagonistas también le entregan vigor al texto y fomentan la libre interpretación de su significado.

Palet, una artista comprometida
Malena Palet, actriz, bailarina, cantante y asistente de dirección, nacida en Mar del Plata, se destaca por su personificación de la joven fuera de eje en Cosas mías. Finalizada la función, la artista, que la temporada pasada actuó en Perpetua: Una crónica finita, fue entrevistada por El Café Diario.
¿Cómo fue la preparación de MicroObras?
Estuvimos un montón de meses preparándolas. Somos todos estudiantes de la Universidad Nacional de las Artes y estamos haciendo una resistencia para todo esto que está pasando, pero también somos un grupo de amigos que se está divirtiendo mucho. Son dos obras originales nuestras, también tienen música original, el libro es original.
¿Empezamos hablando de Cosas mías?
Está un poco basado en nuestras personalidades. Nos dimos cuenta de que, con el correr de la experimentación, fueron saliendo cosas de cada personaje que eran una especie de llevar al extremo cada personalidad. Entonces, nos agarramos de eso y lo llevamos a la obra.
¿Y qué podés contar de tu personaje, esa chica estresada, agobiada y ayudada por sus amigos?
Yo tengo algo que me diferencia de mis amigos, que quizás es una cuestión del orden, que obviamente en el papel está súper exagerado. Contamos la historia de una chica y sus dos amigos que tienen también sus personalidades, que intentan descubrir qué le pasa, y en eso se meten en su mente y pasan cosas.
Los nadadores le brindan un efecto muy particular, ¿no?
Sí, hasta con las mallas, y por cómo se van moviendo en el escenario. De hecho, cuando hicimos las fotos y los videos para publicitar la obra, mucha gente nos preguntaba si era una obra sobre nadadores. No entendían por qué hicimos fotos en una pileta, no sabían cómo íbamos a llevar eso al escenario. Y creo que encontramos unas estrategias muy divertidas. Siempre depende del público, depende de nosotros, depende de las cosas que se dan. Se da esa química entre nosotros porque nos llevamos muy bien.
MicroObras y dos obras bien diferentes
¿Como espectadora, qué opinás de Pakiasas, que tiene una estructura y un estilo diferente a Cosas mías?
Yo soy la asistente de dirección, así que de hecho también estuve muy al tanto de todo lo que pasaba. Josefina Coppa es la directora, ella tomó todas las decisiones y yo trato de colaborar. No estuve desde un primer momento, yo me incorporé a la obra ya presentada. Se gestó el año pasado en la Universidad y este año se retomó, se cambiaron las intérpretes, se complejizó muchísimo más y me pidieron ser asistente. Entonces yo la obra la vi por primera vez como espectadora.
¿Cómo ves a las tres protagonistas?
El trabajo y la capacidad de las chicas me parecen increíbles. Entre ellas son amigas, se conocen hace mucho tiempo, van juntas a la Universidad, entonces también logran una explosión de color y todo el mensaje que quieren dar también es muy arbitrario, porque las palabras salen y cada uno lo interpreta a su manera.

MicroObras, o la resistencia por la cultura y el arte popular
Al principio mencionabas la resistencia que están haciendo ustedes, como tantos artistas, en estos momentos tan complicados para la cultura y el arte popular. ¿Querés agregar algo más sobre el tema?
Sí, nosotros en principio nos juntamos porque queríamos hacer cosas juntos, pero también nos terminamos dando cuenta de que, con todo este panorama que se empezó a visibilizar en el segundo cuatrimestre de la Universidad, que estamos desde abril haciendo marchas federales. Pero en este segundo cuatrimestre fue muchísimo más movido porque se fue a encender la universidad, nos dimos cuenta de que lo que estábamos haciendo era un acto de resistencia.
¿Cómo analizás esta resistencia, qué valor le asignás?
De mi parte creo que es muy valioso lo que estamos haciendo. La Universidad está atravesando un momento crítico. Muchos de los docentes están por debajo de la línea de pobreza, el presupuesto se renovó el año pasado y se aumentó, pero muy poco y no sirve, por eso estamos luchando por el presupuesto del año que viene.
La situación está bastante complicada y queremos valorar que todos los integrantes del Grupo Tramoya somos estudiantes o graduados de la universidad pública, ninguno de nosotros supera los 30 años, y logramos hacer esto. Lo aprecio mucho y lo veo como un espacio de resistencia.
Ciclo MicroObras
Cosas mías – Pakiasas
Jufré 444, CABA
Sábado 23 de noviembre, 17.30 h
Domingo 24 de noviembre, 16 h
Entradas en boletería o por Alternativa teatral
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